jueves, 27 de marzo de 2014

LAS TAREAS DOMICILIARIAS… ¿PARA QUÉ SIRVEN?

Desarrollan hábitos de trabajo y responsabilidad (“detrás de un niño que hace las tareas hay un niño responsable”). Constituyen un medio para maestra y padres de verificar y evaluar el aprendizaje y la atención de los alumnos en clase. Motivan al niño a recabar información sobre temas determinados y refuerzan el aprendizaje de algunas destrezas y/o habilidades.
Para tener en cuenta:
Ø  Es muy importante que el niño tenga un lugar específico para hacer sus tareas escolares: Una mesa y una silla en un lugar tranquilo y con mínimos distractores; materiales mínimos al alcance: lápices, regla, borrador, sacapuntas, revistas para recortar, tijeras, goma, papel, diccionario y material de lectura y consulta (enciclopedias, libros de texto, computador etc.).
Ø  Si su el hijo/a no ha podido cumplir con la tarea por razones justificadas (compromisos familiares, imprevistos, etc.), no le haga la tarea usted ni lo obligue a hacerla en la noche, cuando está cansado .Escriba una nota explicando la situación en el cuaderno de comunicados.
Ø  Si observa que el niño comete importante cantidad de errores, es importante conversarlo con la maestra para  poder establecer medidas de apoyo en conjunto.
Ø  Los niños no deben pasar todo su tiempo libre “haciendo tareas”.  Algunos padres y madres ponen tareas extras para sus hijos como un medio de “tenerlos ocupados”. Sin embargo, el períodos que pasan los niños en casa fuera de la escuela, también debe ser aprovechado para desarrollar sus destrezas sociales (juego y deporte), relajarse y descansar, desarrollar destrezas artísticas (cursos, actividades artísticas) y lo más importante: reforzar los lazos afectivos en la familia.
REGLA 1... Evite sentarse a trabajar con el/la niño - Los niños deben aprender a trabajar solos. La presencia constante de un adulto solamente reforzará la dependencia. Esto puede ser una manera de incrementar su autoestima… “TÚ PUEDES”. Si es necesario más supervisión debido a eventuales dificultades del niño frente al contenido o habilidad a trabajar, ponga límites muy claros. Por Ejemplo: “Tienes que hacer 10 sumas: voy a acompañarte durante las dos primeras para ayudarte y tú haces el resto. Cuando termines, voy a dedicarte 10 minutos para que las revisemos juntos”.                                                                                                 
REGLA 2... Ponga límites - Asigne  un tiempo razonable fijo para el trabajo escolar y de preferencia siempre a la misma hora. Los padres no deberían dedicar más de una hora y media diaria a supervisar trabajo escolar. Establezca consecuencias claras y consistentes para después de hacer la tarea: “Después de terminar tu tarea puedes salir a jugar...” ASEGÚRESE DE QUE SE CUMPLA LA REGLA.
REGLA 3... Calma y serenidad - En muchas ocasiones la mamá o el papá no están disponibles para ayudar en el trabajo escolar, bien sea por situaciones de trabajo o bien porque les dificulta mantener una actitud adecuada. La persona que ayude en el trabajo escolar debe transmitir calma y serenidad. No debe exasperarse, gritar, ser sarcástico ni ponerse de mal humor “la buena actitud al trabajo se transmite”…

REGLA 4… Valore el esfuerzo que su hijo/a realiza - Felicite a su hijo/a por haber terminado la tarea. Demuéstrele que usted está orgulloso por su esfuerzo.  Recuerde que no hay nada más importante para la autoestima de los niños que las alabanzas de los padres y de las personas que los rodean. El elogio debe ser dado cuando el niño haya conseguido algún objetivo por sí mismo, terminar la tarea correctamente, haber sacado buenas calificaciones, etc., unas palabras de aliento y un buen abrazo son muy valoradas por el pequeño.

CARNAVALES DE ANTAÑO

1866. El Carnaval comenzaba en los primeros días de enero.
El juego de agua era prácticamente universal. Las calles quedaban desiertas los tres días a las horas en que el juego con agua se permitía. Viejos y jóvenes, hombres, mujeres, negros y blancos, criollos e inmigrantes, ricos y pobres, gobernados y gobernantes, jugaban con bombas, baldes de agua y huevos……
    ¿Qué más se tiraban los combatientes? En ocasiones con huevos de gallina o gaviota o los muy tempranamente prohibidos huevos de avestruz, prácticamente mortales, piedras a cuenta de huevazos, harina y polvos coloreados, tarros, cajas de  lata, canastas, vejigas, frutas, aguas sucias, bolsas de arena y cal, almidón, pintura ¡y hasta gatos!”

José P. Barrán – “Historia de la Sensibilidad del Uruguay”

lunes, 24 de marzo de 2014

GOL de MARADONA por Eduardo Galeano



Fue en 1973. Se medían los equipos infantiles de Argentinos Juniors y River Plate, en Buenos Aires. El número 10 de Argentinos recibió la pelota de su arquero, esquivó al delantero centro del River y emprendió la carrera.
Varios jugadores le salieron al encuentro: a uno se la pasó por el jopo, a otro entre las piernas y al otro lo engañó de taquito. Después, sin detenerse, dejó paralíticos a los zagueros y al arquero tumbado en el suelo, y se metió caminando con la pelota en la valla rival. En la cancha habían quedado siete niños fritos y cuatro que no podían cerrar la boca.
Aquel equipo de chiquilines, los "Cebollitas", llevaba cien partidos invictos y había llamado la atención de los periodistas.
Uno de los jugadores, "El Veneno", que tenía trece años, declaró:
-"Nosotros jugamos por divertirnos. Nunca vamos a jugar por plata. Cuando entra la plata, todos se matan por ser estrellas, y entonces vienen la envidia y el egoísmo".
Habló abrazado al jugador más querido de todos, que también era el más alegre y el más bajito: Diego Armando Maradona, que tenía doce años y acababa de meter ese gol increíble. Maradona tenía la costumbre de sacar la lengua cuando estaba en pleno envión. todos sus goles habían sido hechos con la lengua de afuera. De noche dormía abrazado a la pelota y de día hacía prodigios con ella. Vivía en una casa pobre de un barrio pobre y quería ser técnico industrial.
  • Observen los cambios que introduce el narrador, cuando hay intervención directa de uno de los personajes.
  • En este texto, el narrador es omnisciente. Narra la historia sin participar de la misma ni convertirse en personaje.

La pelota

"Era de cuero, rellena de estopa, la pelota de los chinos. Los egipcios del tiempo de los faraones la hicieron de paja o cáscaras de granos y la envolvieron en tela de colores. Los griegos y los romanos usaban una vejiga de buey, inflada y cosida. los europeos de la Edad Media y del Renacimiento disputaban una pelota ovalada, rellena de crines.
En América, hecha de caucho, la pelota puede ser saltarina como en ningún lugar...
La cámara de goma, hinchada por inflador y recubierta de cuero, nació a mediados del siglo pasado, gracias al ingenio de Charles Goodyear, un norteamericano de Connecticut. Y gracias al ingenio de Tossolini, Valbonesi y Polo, tres argentinos de Córdoba, nació mucho después la pelota sin tiento. Ellos inventaron la cámara con válvula, que se inflaba por inyección, y desde el Mundial del 38 fue posible cabecear sin lastimarse con el tiento que antes ataba la pelota.
Hasta mediados de este siglo, la pelota fue marrón. Después blanca. En nuestros días, luce cambiantes modelos, en negro sobre fondo blanco. Ahora tiene una cintura de setenta centímetros y está revestida de poliuretano sobre espuma de polietileno. Es impermeable, pesa menos de medio kilo y viaja más rápido que la vieja pelota de cuero, que se ponía imposible en los días lluviosos.
La llaman con muchos nombre: el esférico, la redonda, el útil, la globa, el balón, el proyectil. En Brasil, en cambio, nadie duda que es mujer. Los brasileros le dicen gordita, gorduchinha, la llaman nena,menina, y le dan nombres como Maricota, Leonor o Margarita.
Pelé la besó en el Maracaná cuando hizo su gol número mil. Di Stéfano le erigió un monumento a la entrada de su casa, una pelota de bronce con una placa que dice Gracias, vieja.
Ella es fiel. En la final del Mundial del 30, las dos selecciones exigieron jugar con pelota propia. Sabio como Salomón, el juez decidió que el primer tiempo se disputara con pelota argentina y el segundo tiempo con pelota uruguaya. Argentina ganó el primer tiempo y Uruguay el segundo. Pero la pelota también tiene sus veleidades, y a veces no entra al arco porque en el aire cambia de opinión y se desvía. Es que ella es muy ofendidiza. No soporta que la traten a patadas, ni que le peguen por venganza. exige que la acaricien, que la besen, que la duerman en el pecho o en el pie. Es orgullosa, quizás vanidosa, y no le faltan motivos: bien sabe ella que a muchas almas da alegría cuando se eleva con gracia, y que son muchas las almas que se estrujan cuando ella cae de mala manera..."
Fragmento de "El fútbol a sol y sombra", de Eduardo Galeano.

El mundial del 50

"... Siete países americanos y seis naciones europeas, recién surgidas de los escombros, participaron en el torneo brasileño del 50. La FIFA prohibió que jugara Alemania. Por primera vez, Inglaterra se hizo presente en el campeonato mundial. Hasta entonces, los ingleses no habían creído que tales escaramuzas fueran dignas de sus desvelos. El combinado inglés cayó derrotado ante los Estados Unidos, créase o no, y el gol de la victoria norteamericano no fue obra del general George Washington, sino de un centrodelantero haitiano y negro llamado Larry Gaetjens.
Brasil y Uruguay disputaron la final en Maracaná. El dueño de la casa estrenaba el estadio más grande del mundo.
Brasil era una fija,la final era una fiesta. Los jugadores brasileños, que venían aplastando a todos sus rivales de goleada en goleada, recibieron, en la víspera, relojes de oro que al dorso decían: Para los campeones del mundo. Las primeras páginas de los diarios se habían impreso por anticipado, ya estaba armado el inmenso carruaje de carnaval que iba a encabezar los festejos, ya se habían vendido medio millón de camisetas con grandes letreros que celebraba la victoria inevitable.
Cuando el brasileño Friaça convirtió el primer gol, un trueno de doscientos mil gritos y muchos cohetes sacudió el monumental estadio. Pero después Schiaffino clavó el gol del empate y un tiro cruzado de Ghiggia otorgó el campeonato a Uruguay, que acabó ganando 2 a 1. Cuando llegó el gol de Ghiggia, estalló el silencio en Maracaná, el más estrepitoso silencio de la historia del fútbol..."


Fragmento de "El fútbol a sol y sombra", de Eduardo Galeano.

El fútbol


Fragmento del libro de Eduardo Galeano: "El fútbol a sol y sombra"
"La historia del fútbol es un triste viaje del placer al deber. A medida que el deporte se ha hecho industria, ha ido desterrando la belleza que nace de la alegría de jugar porque sí. En este mundo del fin de siglo, el fútbol profesional condena lo que es inútil, y es inútil lo que no es rentable. A nadie da de ganar esa locura que hace que el hombre sea niño por un rato, jugando como juega el niño con el globo y como juega el gato con el ovillo de lana: bailarín que danza con una pelota leve como el globo que se va al aire y ovillo que rueda, jugando sin saber que juega, sin motivo, y sin reloj y sin juez."...